Junto al SAG, Seremi de Salud y Seremi de Agricultura se realizó una visita introspectiva al recinto que funciona de manera irregular.
Debido a que siguieron las constantes denuncias por la irregularidad de la Avícola ubicada en Espinalillo, generando malos olores y vectores que atraen el mal tratamiento de estos negocios, se realizó una nueva fiscalización a las instalaciones del recinto junto al Servicio Agrícola Ganadero, el Seremi de Salud y la Seremi de Agricultura.
El primer acotamiento que se realiza sobre el recinto es que está edificado bajo una torre de alta tensión, poniendo en riesgo la salud tanto de las y los trabajadores, como de las aves. Además, no cuenta con permisos de funcionamiento ni edificación por parte de la Dirección de Obras Municipales.
Ya se han aplicado distintas multas y sanciones a los controladores de la avícola debido a las situaciones indeseables que han ocurrido, como el esparcimiento de los purines en la calzada. Estos procedimientos se seguirán realizando hasta que el negocio se cierre o regularice la totalidad de sus funciones.
