Mediante una alianza público-privada, se trabajará en mejorar la eficiencia de los procesos productivos en la gestión y el uso del recurso hídrico de los predios agrícolas afectados por la sequía.
Con el fin de aumentar la competitividad del agro en la comuna de Tiltil, la Corporación Empresarial para el Desarrollo de Tiltil (ProTiltil) y la Agencia de Sustentabilidad y Cambio Climático (ASCC), junto a los agricultores, el municipio y otros actores locales, firmaron un Acuerdo de Producción Limpia (APL) para fortalecer el desarrollo económico del territorio.
Este trabajo conjunto promoverá la adopción de mejoras tecnológicas y medidas de eficiencia en la gestión de los recursos hídricos en los procesos productivos. Estará focalizado especialmente en aquellos agricultores y agricultoras afectados por la mega sequía que sufre Tiltil, con niveles críticos de disponibilidad de agua, lo que ha implicado la declaración de Decretos de Escasez Hídrica en 12 oportunidades desde el año 2008.
La directora ejecutiva de la Agencia de Sustentabilidad y Cambio Climático, Ximena Ruz, afirmó que “vamos a acompañar en los próximos 12 meses a los productores agrícolas de Tiltil porque creemos que estamos llegando a soluciones que son necesarias para poder avanzar en esta gran crisis climática que estamos viviendo como país. Somos solo parte de la solución, ya que el instrumento APL ayuda a coordinar distintos actores, ponerlos de acuerdo, para avanzar en mejoras que vayan en beneficio de los pequeños agricultores”.
Por su parte, el alcalde de Tiltil, Luis Valenzuela, menciona que “para la comuna, la sequía no es una novedad, se está transformando en una cotidianidad y eso es peligroso. Nos tenemos que empezar a adaptar a la falta de lluvias y lo positivo de la firma de este APL es que entre muchos logramos aunar fuerzas, empujar un objetivo común, para justamente revertir esta situación y poder salvaguardar la agricultura, sobretodo la tuna y la aceituna, para Tiltil, para la región y el mundo”.
Entre las principales metas del APL destacan la ejecución de un plan de gestión del agua de riego eficiente y el apoyo financiero a los agricultores que cuenten con iniciación de actividades para la instalación de, al menos, una tecnología de eficiencia hídrica, tales como tecnificación del riego, reparaciones o mejoras en los canales de regadío, sistemas de reutilización de aguas, paneles solares, sistema de monitoreo, instrumentos de medición hídrica, entre otras opciones.